¡QUE EL SEMEN NO ESTÁ PARA TIRARLO, HAY QUE AHORRARLO...!


Os habréis quedado de piedra con el título de este post, y como todo, merece una explicación, que seguramente os dejará (me encanta esta palabra desde que la aprendí de MOCHO) ojipláticos, lo mismo que a mí.

Cualquier antropólogo que se precie (y no sólo la marisabidilla de la doctora BONES en la serie del mismo nombre) sabe que la concepción antropológica y cosmogónica de la realidad difiere de unos grupos humanos a otros, de ahí las diferencias en todo lo que a modelos de sociedad, religiones, organizaciones familiares, castas, tribus, etc, etc… que se producen en los distintos grupos humanos.

Pues bien, existe una tribu, llamada de los SAMBIA (en PAPÚA NUEVA GUINEA), que consideran que tanto los hombres como las mujeres nacen con un órgano sexual interno (no los genitales) sino un auténtico órgano interno, del que depende verdaderamente la procreación, que en el caso de lo hombres nace “seco”, esto es, sin funcionalidad, y por lo tanto, antes de que el hombre alcance la madurez sexual, es neceario “ponerlo a funcionar”, lo que no sucede, como en todos los hombres, sino cuando se alcanza la pubertad y el varón se desarrolla plenamente… la diferencia estriba en que, mientras que nosotros sabemos que la madurez sexual en el hombre con todas sus manifestaciones externas (aparición del vello corporal, gravedad de la voz, desarrollo muscular, crecimiento de pene y testículos, producción de semen, etc, etc…) es debida a que, por esa edad, la producción de testosterona alcanza sus niveles máximos, ellos creen que precisamente esos cambios se han producido como consecuencia de resucitar el tingu de los jóvenes

Ahora bien… ¿Cómo se pone a funcionar el tingu de los jóvenes para que se conviertan en hombres de provecho? No nos equivoquemos, que ser un honbre de provecho en la tribu de los SAMBIA supone convertirse en un aguerrido guerrero y cazador, es decir, la máxima expresión de la virilidad, y si no, que se lo pregunten a los conquistadores, antropólogos y exploradores que antes de que los SAMBIA tuvieran contacto con otros hombles blancos, desaparecieron entre sus manos, ya que, entre otras cosas son unos reputados cazadores y reductores de cabezas (versión guineana de los temibles JÍBAROS)… Por supuesto, ellos no desconocen, aunque sólo sea por la observación simple y llana de la naturaleza, la importancia que tiene el semen en la procreación humana, y en el hecho diferenciador del ser varón, pero desconocen –no pueden saberlo, más allá de sus rudimentarios conocimientos- que el semen se produce en los testículos… Para ellos el semen se produce en ese tingu interno que todos los hombres tienen, pero hemos dicho antes que en el caso de los niños, éstos nacen con el tingu muerto, seco, sin capacidad creadora de nuevo semen… entonces la respuesta para ellos es bien sencilla… Si las plantas crecen regándolas, el tingu de los jóvenes se “hidrata”, sale de su sequedad original, pues no con agua, sino con semen… y como semen llama a semen es de esta manera que el tingu de los jóvenes se activa

Para ello, a partir de los 8 años, los niños SAMBIA son apartados de su madre, hay que aclarar que hombres y mujeres viven en estrictas condiciones de separación, es decir, los hombres por un lado y las mujeres por otro, aunque ahora después os aclararé el por qué, y a partir de ese momento pasan a vivir en la casa comunal de los hombres, durante los próximos diez años, en los que serán apadrinados por otro hombre SAMBIA que se encargará, durante este tiempo, de ir regando, periódicamente el tingu de su joven ahijado para que se ponga en funcionamiento -ahora es donde los estudios antropológicos difieren-, ya que no me ha quedado claro si esa irrigación del tingu del joven por parte del mayor se produce vía oral (felación) o vía anal (sin más comentarios, podría decir, porculación…) Y esta es la juventud que le espera al joven SAMBIA, ser sodomizado periódicamente por su tutor, mentor y padrino en el seno de la tribu.

Para ellos, evidentemente, este comportamiento no tiene nada de homosexual, ya que de lo que se trata es precisamente de lo contrario, convertir a los niños en hombres… como la naturaleza sigue su curso, a los 14 ó 15 años los niños SAMBIA, pasan por la pubertad, se desarrollan plenamente y esa es la prueba incontestable para los SAMBIA de que su método de puesta en funcionamiento del tingu es eficaz… aunque durante este tiempo de resucitación del tingu, los jóvenes no solamente son sodomizados por los adultos, sino que además les enseñan, en plan lecciones escolares, todos los secretos del sexo femenino… que en el fondo es de lo que se trata… Desde la pubertad hasta los 18 ó 19 años, aunque se haya verificado el convertirse en un hombre, no obtendrán permiso aún para casarse, ya que en este periodo de transición tendrán un papel intermedio, en efecto, puede que lo hayáis adivinado, se convertirán en tutores de la nueva generación de niños y adolescentes

Después podrán casarse sin problemas, y tener relaciones sexuales con su mujer… aunque no vivirá con ella, ya que hemos adelantado antes que hombres y mujeres viven en estricta separación, en casas comunales diferentes, y ello se debe a otra concepción de la realidad de los SAMBIA, de la misma forma en que el tingu se ha activado por todo el semen que te han inoculado, de la misma manera, el tingu –entendido como una hucha de semen- ¡puede agotarse! De hecho, y esto lo creen tan a ciencia cierta que consideran que, haciendo el amor con sus mujeres, agotan su tingu, por lo que cada eyaculación mal aprovechada los acerca más a la muerte (vamos que cuando el tingu se te seca, pues te mueres)… por ello, casi todos los días del año son “tabú” para tener relaciones sexuales (es decir, de mal augurio), de tal suerte que sólo les quedan, mal repartidos en el año, apenas cien días en los que follar no es tabú… de nuevo no me he aclarado si estos días “tabú” para la efusión del semen se refieren sólo a las relaciones sexuales con los mujeres, o prohiben también la irrigación del tingu de los jóvenes impúberes.

Como habréis podido comprobar, una curiosa creencia ésta, la del tingu de los hombres SAMBIA, aunque bien mirado no parece una cosa tan decabellada, pensad por ejemplo en los modelos y actores porno de la famosa BEL-AMI, que primero mucho “tragar” y luego más “follar”, pero debe ser verdad que “el desperdicio se paga” ya que… ¿Conocéis que ha sido de ellos más allá de los 30 años, si es que llegan? ¿Se les habrá secado el tingu? ¿Se habrán muerto…? ¿Dónde coño se meten o se esconden? ¿Se los tragará la tierra?? ¿O habrán emigrado a PAPÚA NUEVA GUINEA para que los SAMBIA les pasen la ITV del tingu, y poder volver a los rodajes? Yo no lo sé… misterios de la antropología, si me entero, ya le dedicaré otro post… como éste.