EL BULEVAR: GALERÍA DE GRANADINOS ILUSTRES

Que no os vayáis a creer los madrileños que sóis los únicos en tener una mega-bandera de ESPAÑA en la plaza de COLÓN, que aquí, en provincias –como decís peyorativamente los capitolinos- también tenemos una, concretamente al inicio de lo que se ha llamado, que antes era AVENIDA DE LA CONSTITUCIÓN, por los finos el bulevar, resultado de añadir un paseo peatonal longitudinal entre los dos carriles de circulación de dicha avenida, y que no os creáis, que todo ha sido gracias a nuestro Ilmo. Sr. Alcalde, TORRES HURTADO, que ha tenido a bien copiar lo de vuestra bandera, que ya se sabe, “las catetadas y el mal gusto están para ser copiados”, como tu madre, cuando puso los reposabrazos y los reposacabezas de los sillones de ganchillo, porque a la vecina del quinto le quedaban divinos de la muerte…

Al menos eso sí, al final, ya se sabe los granínos y su malafollá, que al final “ha quedao el bulevar muy bonico” (Nota.- En GRANADA los diminutivos los solemos hacer en –ico, -ica; reminiscencia que nos quedó de la colonización de esta tierra con castellano aragoneses después de la reconquista), os dejo las imágenes que lo demuestran, tomadas en el punto medio del bulevar, desde el centro al “cabezón” y desde el centro a FRASCUELO, no os preocupeís que enseguida os explico estas ubicaciones tan específicas, que en nada tiene que ver con un GPS…

Y es que, el Ayuntamiento decidió, para decorar el bulevar, colocarnos en él a diez figuras representativas de GRANADA, que miedo nos daba a los granaínos imaginar qué se iba a sacar el Sr. Alcalde de la manga, porque lo que la política entiende por “representativo” los ciudadanos no lo entienden y viceversa, o como dice MOCHO, viceberzas, que eso lo he aprendido también de él (dígase por ejemplo que si los granaínos hubiesen dicho “poner a MIGUEL RÍOS” al Alcalde le da un ataque de risa).

En primer lugar lo que los granaínos hemos bautizado como el “cabezón”, que no es otra sino la efigie de GONZALO FERNÁNDEZ DE CÓRDOBA (1.453-1.515), uno de los mejores militares de toda la historia de ESPAÑA, llamado por eso EL GRAN CAPITÁN, su relación con GRANADA es indicutible, ya que participó en todo el proceso de nuestra reconquista, siendo notable su intervención en la toma de TAJARJA, en la rendición de ÍLLORA, y como espía y negociador fue clave en la propia rendición y toma de GRANADA. Los Reyes Católico le supieron premiar, dándole el señorío de ÓRGIVA, y numerosas fincas y tierras en GRANADA. Después de caer en desgracia, por las envidias de sus contemporáneos, el Rey FERNANDO, viudo ya de ISABEL, le quitó todos sus rangos militares, y él mismo se retiró a LOJA, donde murió. Actualmente se encuentra enterrado en el MONASTERIO DE SAN JERÓNIMO, donde también se conserva su espada. Aunque no debía de tenerle el mismo cariño el escultor que eligió el Ayuntamiento para dedicarle su estatua en el bulevar, porque, aunque parezca lo contrario, la foto no es que esté tomada de cerca, es que es literalmente “todo un cabezón” sobre un soporte de granito, de ahí el mote popular.

Yendo en dirección hacia FRASCUELO, que se encuentra al final del bulevar, pues nosotros estamos paseando desde la bandera, nuestro punto de partida, se encuentra la estatua, sentada en un banco y leyendo, de ELENA MARTÍN VIVALDI (1.907-1.998), en su juventud cursó estudios en el INSTITUTO PADRE SUAREZ de GRANADA, siendo una de las pocas mujeres que estudiaba en su época, estudió luego Filosofía y Letras y sacó unas oposiciones de archivera, trabajando en el Archivo de la Universidad, lo que le permitió la independencia económica necesaria para poderse dedicar a escribir. Aunque es contemporánea a varios miembros de la Generación del 27, ciertamente no lo es desde un punto de vista poético, algunos críticos han dicho de ella que fue “la primera autora granadina que supo escribir sin el lastre de ALBERTI o LORCA, pero entendiendo perfectamente a un JUAN RAMÓN JIMÉNEZ, o a un BECQUER” Su poesía es intimista, melancólica y romántica (como diría mi abuela, ¡ésta tía está follolla!, que es como ella definía los estados carenciales de ánimo), y la naturaleza, el agua, los árboles y sobre todo los pájaros y las aves son una constante en su poesía. La verdad es que todo ello está muy bien recogido en su estatua, a la gente le gusta sentarse a su lado y hacerse la foto de rigor, mi novio y yo nos sentamos con ella cuando quedamos con nuestra amiga TERESA, y hay que esperarla, aunque mi novio siempre le dice “¡Señora, no se distraiga leyendo, que le van a quitar el bolso!” aunque no es con ella donde más solemos esperar.

Le sigue, nuestro poeta más reconocido y universal, aunque yo me rasgo constantemente las vestiduras cuando escucho su nombre y es FEDERICO GARCÍA LORCA, porque es que me puede que la misma ciudad, facha y derechona, que no nos engañemos, GRANADA ha sido siempre muy derechona (la primera ciudad en ataques a gays de la Comunidad de Andalucía, según CANAL SUR TELEVISIÓN, aunque debería llamarla TELESEVILLA) que te asesinó ahora sea la que tanto te quiere, te ensalza y te encumbra, y encima viviendo del cuento, que ponerle la etiqueta o la marca FEDERICO GARCÍA LORCA a cualquier iniciativa municipal ya le garantiza el éxito, y eso que el pobre poeta de FUENTEVAQUEROS (1.898 – 1.936) no es de las estatuas más agraciadas físicamente, que él era mucho más guapo, tirar de SAN GOOGLE BENDITO y comprobadlo… En lo que se refiere a su producción literaria os recomiendo el POETA EN NUEVA YORK y el ROMANCERO GITANO, que me diréis que son las más típicas, pero en el fondo es que son las que más me gustan, ya que no suelo ser mucho de teatro, ni de LORCA, ni de nadie…

A continuación, según paseamos, MANUEL BENITEZ CARRASCO (1.922-1.999), poeta, nacido en pleno barrio del ALBAYCÍN, asistió a las escuelas del AVE MARÍA, donde según sus palabras “aprendí las primeras letras”. En el año 1.947 se traslada a vivir a MADRID, para buscar fortuna, momento en el que de verdad llega a triunfar como poeta, pero no era un poeta al uso, de escribir y dar conferencias, él era un auténtico poeta de cartel, es decir, que se ganaba la vida recitando –literalmente- sus poemas en persona en los escenarios de los bares y clubs nocturnos de la capital. Sin embargo, por extraño que esto nos pueda parecer en la actualidad, su presencia garantizaba el lleno del local… Con todo, no satisfecho, decide hacer un hueco en Hispanoamérica, y es donde triunfa verdaderamente, especialmente en CUBA y en MÉXICO, donde pasó la totalidad de su vida, aunque a partir de la década de los setenta alterna estancias en MÉXICO con su ciudad natal, GRANADA, donde fallece en el año 1.999. EL Ayuntamiento lo declaró hijo predilecto de la ciudad en el año 1.998, cosa rara, un año antes de su muerte, que ya se sabe que en este país los reconocimientos oficiales suelen ser post mortem…

Le sigue SAN JUAN DE LA CRUZ (1.542-1.591), que he de reconocer aquí mi ignorancia, no sobre el santo, místico y reformador de la Orden del Carmelo, sino por su conexión con GRANADA, que desconocía por completo. Según me saca de mi ignorancia (o me mantiene en ella, que no me fío mucho de mis fuentes) la WIKIMENTIROSA resulta que SAN JUAN DE LA CRUZ, entre sus muchas peripecias (hasta estuvo encarcelado por la inquisición en ÁVILA, de donde se escapó descolgándose por una ventana), fue nombrado superior del Convento de los Mártires de nuestra ciudad, en donde estuvo hasta el año 1.588 en que fue trasladado a SEGOVIA. De toda su producción, mucho más ameno y sencillo de leer que su coetánea, SANTA TERESA DE ÁVILA, destaco la LLAMA DE AMOR VIVA y SUBIDA DEL MONTE CARMELO, obra suya que desconocía pero que un año me tragué enterita, de un tirón, en la playa…

A nuestro siguiente personaje del bulevar lo conocéis todos los que seáis de la era pre-euro, aunque sólo sea porque aparecía en los antiguos billetes de cien pesetas, me refiero a MANUEL DE FALLA (1.876-1.946). Durante su estancia en GRANADA, a partir del año 1.920, invitado por un matrimonio amigo, compuso su primera obra en nuestra tierra “HOMENAJE POUR LE TOMBEAU DE PAUL DEBUSSY”… Durante su etapa granadina se alojó en el Carmen de Santa Engracia, en la Calle Real de la Alhambra, en nuestra ciudad se codeó con lo más representativo de la intelectualidad granadina, especialmente FEDERICO GARCÍA LORCA, gran amigo y admirador suyo, aunque el reconocimiento era recíproco, con quien colaboró en la organización del I CONCURSO DEL CANTE JONDO (para recuperar este arte tan andaluz) y que se celebró por vez primera en la Plaza de los Aljibes del entorno del monumento nazarita, los días 13 y 14 de Junio de 1.924. Posteriormente, en el año 1.926, fue aceptado como Académico de la Real Academia de Bellas Artes de Granada.

Le sigue PEDRO ANTONIO DE ALARCÓN (1.865-1.898), que no es sólo la más célebre calle de pubs y de botellones de nuestra ciudad, que cualquier estudiante la conoce a los diez minutos de pisar GRANADA,  hombre de profundos ideales liberales y progresistas abandona pronto GRANADA, a la que considera una ciudad reaccionaria, para irse a vivir a MADRID (como casi toda la cultura de su época). Escribió numerosos artículos periodísticos, de gran relevancia en su entorno, y después se dedicó a escribir libros de viajes, destacando el que hizo describiendo los pueblos y las rutas de su ALPUJARRA granadina. Fue además consejero de ALFONSO XIII en el año 1.975, diputado y senador, además de embajador de ESPAÑA en NORUEGA y SUECIA, y académico de la Real Academia de la Lengua Española desde 1.877. A partir de esta fecha se impuso un silencio absoluto, tanto de la vida pública como de la literaria, quizás afectado por la situación política decadente de ESPAÑA, por la pérdida de sus hijos, fallecidos todos a excepción de una hija, y por las críticas de sus contemporáneos, de él, dijo, por ejemplo, con cierta crueldad, MANUEL DE PALACIO: "Como literato vale mucho, como folletinista, menos, como político, casi nada, y como dramaturgo, cero”.

Y no puede faltar en nuestra galería de granadinos ilustres nuestra célebre EMPERATRIZ EUGENIA DE MONTIJO (1.826-1.920), y menos mal que todos la conocemos por el nombre abreviado, que la buena moza se llamaba MARÍA EUGENIA PALAFOX MONTECARRERO Y KIRKPATRICK, Condesa de Teba. El 30 de Enero de 1.856 se casó con el futuro emperador NAPOLEÓN III, a quien dio a su hijo, LUIS NAPOLEÓN el día 16 de Marzo de 1.856. Desde el nacimiento de su hijo su papel político fue más activo, sobretodo en las cuestiones del regalismo, sometimiento del poder temporal de la Iglesia al poder estatal, donde defendió siempre la libertad de la Iglesia frente a las presiones de su marido, especialmente en ITALIA… Desempeñó las funciones de Regente durante las ausencias de su marido en las campañas italianas en el año 1.859 y durante su estancia en ARGELIA en el año 1.865. Mujer culta y preocupada por la ciencia apoyaba económicamente las investigaciones del médico francés LOUIS PASTEUR, que desembocaron en la vacuna contra la rabia. Tras la muerte de NAPOLÉON se retiró a vivir a BIARRITZ, alejada de las tensiones de la vida política… su vida alcanzó tintes de melodrama cuando su único hijo murió en el año 1.879, asesinado por los zulúes, en una visita a ÁFRICA. Siendo familiar de la Casa de ALBA gustaba venir a su ESPAÑA natal donde pasaba temporadas en el Palacio de Liria en MADRID, en una de esas visitas falleció a la edad de 94 años, siendo trasladada a FRANCIA donde fue enterrada junto a su esposo y su hijo.

MARÍA CORTÉS HEREDIA (1.913 – 1.966) ¿Acaso caben dos apellidos más gitanos y con más solera? conocida por el sobrenombre de LA CANASTERA (algún día os hablaré del afán de los pueblos andaluces por sobrenombrar a la gente con motes y apodos) debido al oficio de su padre, JUAN CORTÉS “EL CAGACHÍN”, que se ganaba la vida haciendo canastos tejidos de mimbre, se inició desde muy pequeña en la zambra sacromontana, haciendo de este género del flamenco un arte, en ella, difícil de imitar y que vivía casi como una auténtica vocación personal. Considerada desde muy joven como una de las mejores representantes del flamenco, incluso abandonó en varias ocasiones su GRANADA natal para actuar con su grupo no sólo en otras provincias españoles, sino incluso en el extranjero. Destaca su actuación en la película “MARÍA DE LA O” junto a otros notables del género como CARMEN AMAYA y PEPE MARCHENA. Fue solicitada incluso para bailar en presencia de ALFONSO XIII, en una época en la que aún los reyes estaban envueltos en cierto halo de misterio e inaccesibilidad por parte de la gente sencilla del pueblo.

Terminamos nuestro recorrido, tanto de personajes, como del propio bulevar, a los pies de FRASCUELO, SALVADOR SÁNCHEZ POVEDANO (1.842-1.898). Como le gusta decir a los toreros bien pronto aprendió que en esta vida “más cornadas mete el hambre” y habiendo perdido a su padre debe colocarse como mecánico de ferrocarriles e instalador de papel pintado para sobrevivir, aunque se prepara como torero a escondidas, finalmente toma la alternativa el 27 de Octubre de 1.867 (siendo su estadística, desde entonces, el haber toreado 1.236 corridas y haber matado 3.801 toros) Como detalle curioso os diré que hay un DECÁLOGO DEL TORERO, que aunque fue publicado en el año 1.925 por el crítico taurino MAXIMILIANO CLAVO, en la revista “MUNDO GRÁFICO”, siempre ha sido atribuído a FRASCUELO, y que nos ayuda a entender, un poco, la mentalidad del toreo y del torero:

Amarás a PAQUIRO (otro torero al que FRASCUELO admiraba) por encima de todas las coletas.

No jurarás que vas a meterte en el morrillo del toro para luego no arrimarte nada.

Santificarás LA FIESTA NACIONAL, entendiendo por santificar no tirarte “el pego”

Honrarás a la afición que da cuanto se le pide y más de lo que tiene.

No matarás como RAFAEL, EL GALLO (otro torero del que deducimos que mataba muy mal, por este consejo).

No aburrirás ni a los toros ni a los espectadores.

No hurtarás las ingles a las astas del toro, ni hurtarás tantos billetes como se viene haciendo.

No dirás en los telegramas que tú estuviste colosal y tu compañero fue un desastre.

No desearás a la cupletista o a la cantante de copla de tu prójimo.

No codiciarás el contrato de tu colega, ni el colchón del zapatero…

Añadir, finalmente, que el Ayuntamiento, dada la longitud del bulevar, y que es un espacio peatonal, ha dispuesto que los granadinos también nos podamos sentar tranquilamente en él, podemos hacerlo compartiendo el banco con ANGEL GANIVET, con ELENA MARTÍN VIVALDI, con FEDERICO GARCÍA LORCA o podemos sentarnos en las típicas sillas de enea andaluzas, junto a MARÍA LA CANASTERA, o en el banco de la EMPERATRIZ EUGENIA DE MONTIJO (que suele ser el banco en el que nos gusta sentarnos a mi novio y a mí, para esperar a nuestra amiga, cuando quedamos con ella para salir, ya que vive cerca, y que nos jode cuando nos lo encontramos ocupado, ya que en broma comentamos: “¡Ese banco está reservado para las reinonas, como nosotros!....”, aunque luego también hay bancos, realizados por los mismos escultores de las imágenes, más de diseño, porque deben ser incomodísimos, ya que casi siempre están libres…