Ay, es que hombres así, es que no dan ganas ni de levantarte de la cama.... ¡qué pereza!. Está uno tan a gustito durmiendo en pelotas aún, pero ya dentro del nórdico, esperando que tu amante te traiga el desayuno a la cama... A mí es que me gusta la leche recién ordeñada, jajaa.
Y además, si espera que se lo lleve yo, va listo, jajaja. Bezos.