Vamos a subir un poco la temperatura del blog, que últimamente parece un blog para señoritas. Y aquí se viene a lo que se viene, nadie viene a leer post sesudos de filosofía ni a ver cuáles son las tendencias para la próxima temporada... Y no hay nada más eficaz para elevar los grados de un blog que recurrir a la vieja, la típica, la inseparable, la auténtica compañera del hombre, ¡la polla!. Hala, venga, comételas, que aproveche, jajaja.